El componente principal del Konjac es el glucomanano, que se extrae en forma de harina del tubérculo de la planta Amorphophallus Konjac. Se trata de una fibra soluble con un gran poder espesante y con un aporte calórico muy bajo. Los productos derivados del konjac son 100% de origen vegetal y no contienen ningún alérgeno. Además de no aportar carbohidratos netos y no contienen azúcares ni grasas. La pasta de konjac sólo tiene 6 kcal por ración, por lo que es un sustituto perfecto de la pasta tradicional.
La raiz de konjac, se encuentra en China, Japón e Indonesia; su mayor beneficio es la calidad nutricional que posee, por ser alta en fibra; contiene además aminoácidos esenciales y ácidos grasos polinsaturados, rica en minerales como hierro, potasio, selenio, fósforo y calcio; es un alimento ideal cuando se trata de saciar el hambre, ya que da sensación de llenura. El glucomanano incrementa hasta 200 veces su volumen original después de absorber agua, esto lleva a la sensación de saciedad.
Debido a sus características, además absorbe en gran medida los sabores de los alimentos en los que se añade