La alfalfa, cuyo nombre científico es Medicago Sativa, es una especie de planta herbácea perteneciente a la familia de las fabáceas o Leguminosae. Son hierbas perennifolias, sobre todo erectas a suberectas que alcanzan un tamaño de 30-60 cm de altura, pubescentes a subglabras. Es una planta que se utiliza ampliamente como pasto y con este propósito se cultiva intensamente en el mundo entero. Tiene un ciclo vital de entre cinco y doce años, dependiendo de la variedad utilizada, así como del clima, en condiciones benignas puede llegar a veinte años. Llega a alcanzar una altura de un metro, desarrollando densas agrupaciones de pequeñas flores púrpuras. Sus raíces suelen ser muy profundas, pudiendo medir hasta 4,5 metros. De esta manera, la planta es especialmente resistente a la sequía Tiene un genoma tetraploide. Es una especie que muestra autotoxicidad, por lo que es difícil para su semilla crecer en cultivares de alfalfa ya existentes. Así, se recomienda que sus cultivares se roten con otras especies como maíz o trigo antes de resembrar. La alfalfa procede de Persia, donde probablemente fue adoptada para el uso por parte del humano durante la Edad del bronce para alimentar a los caballos procedentes de Asia Central. Se introdujo en Grecia durante la Primera Guerra Médica en forma de semillas llegadas con el pienso de la caballería persa. Pasó a ser cultivo habitual destinado a la alimentación de los caballos. El humano puede ingerirla como brotes en ensaladas y emparedados. Su habilidad fijadora de nitrógeno incrementado el N del suelo y su uso como pienso animal mejora la eficiencia de la agricultura.
Este producto no contiene elementos transformadores que formen parte de ningún condimento. Colabora con Innova Culinaria asociando condimentos a este producto