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Finlandia

La Gastronomía de Finlandia posee muchas influencias regionales procedentes de otras gastronomías europeas como la rusa.

Las costumbres culinarias de los habitantes de Finlandia está marcada por el consumo de pescado (generalmente de agua dulce), la fermentación de verduras, etc.

Además, es el país donde probablemente el arte de la elaboración de panes ha alcanzado mayor perfeccionamiento. De hecho, el pan de centeno se considera un alimento esencial, y se suele presentar en forma de láminas finas y crujientes, aunque cada región posee sus recetas, incluido el pan agridulce del sudoeste del país y los archipiélagos.

Finlandia mantiene los rasgos característicos de la gastronomía escandinava, como las carnes, los pescados, patatas, coles, etcétera, aunque añade una serie de elementos distintivos, como las empanadas y pastas de pescado, procedentes de Rusia.

La receta finlandesa más tradicional es el kalakukko un gran pan de forma ovalada relleno de pescados como la perca, la bermejuel, o filetes de salmón acompañados de un pedazo de tocino.

La presencia de pescados de agua dulce es también una de las principales particularidades del smörgasbord finés, en comparación con el bufé sueco.

La carne es de gran calidad, y en la mayoría de los casos se pica para elaborar albóndigas o salsas de carne. La carne de cordero, en asados o ahumada, y los embutidos a base de reno para la elaboración de bocadillos son también muy habituales.

La sopa de guisantes, de pescado con leche o nata, el salmón ahumado, los arenques y la empanadas de arroz son también platos muy tradicionales de la comida finesa.
Entre los postres, destaca en riisipuuro, arroz con leche y canela.
Posee influencias de otras cocinas como la sueca, alemana y la rusa, aunque con diferencias propias. Por ejemplo, los platos fineses son generalmente menos dulces que los suecos, y emplean menos crema amarga que los platos rusos. Es muy popular entre los platos callejeros el Porilainen, un tipo de sandwich típico que se puede encontrar en los puestos de comida ambulante. Se elabora con pan y una rodaja de salchicha, y se le añade cebolla picada, pepinillos encurtidos, ketchup, mostaza y en algunos casos mahonesa. El porilainen recuerda de alguna forma a una mezcla entre una hamburguesa y un hotdog.

Desde Rusia vienen como hemos mencionaldo antes, las empanadas y las pastas de pescado, asi como los blinis, pequeñas tortas rellenas de caviar.
En todo caso, la gastronomía de este pueblo tan diverso en su composición étnica y cultural se caracteriza por el empleo constante de la smetana (suero de leche) y de la remolacha, que constituye la base del renombrado bortsch.

Se cocinan también todo tipo de setas y diversos pasteles confeccionados con pastas de hojaldre rellenas de carne, pescados, legumbres o champiñones, denominados piroghi. El sakuski hermana además la gastronomía rusa con la escandinava, pues se trata de un pariente cercano del smörgasbord sueco y del smörrebröd danés.
Destaca el peso de la cultura lapona o sami, que abarca una región que se extiende por el norte de Noruega, Suecia y Finlandia. El plato típico de los lapones es el guisado de reno, que suele ir acompañado de puré de patatas. Otro plato típico son las empanadillas. Hay una gran variedad de ellas ya que se rellenan de ingredientes tan dispares como el arroz, el pescado o el queso. Por otra parte, el pescado es un ingrediente imprescindible en Laponia, siendo el salmón el máximo exponente.

También existe una gran variedad de especialidades regionales aparte de la gastronomía lapona, destacando entre ellos los deliciosos pasteles salados de Carelia o el “Kalakukko” savoniano o careliano, plato que consiste en pescado cocinado dentro de una corteza de pan.

Históricamente, la alimentación finlandesa se basaba en los cereales; el pan y las gachas se complementaban por la patata y otros tubérculos, por los guisantes y alubias, carne salada o ahumada, formas típicas de conservar la comida para aguantar las temperaturas septentrionales.

La forma de cocinar variaba según las regiones; en las zonas más occidentales, según la herencia sueco-escandinava, se solía asar o guisar la comida a fuego abierto, mientras que en las partes más orientales de Finlandia la comida se horneaba, como solían hacer los Rusos.

En siglo XX, sin embargo, la gastronomía finlandesa sufrió un gran cambio con las migraciones urbanas, incluyendo en la variedad de alimentos ingredientes extra-europeos y unificándose bastante las costumbres culinarias en las diferentes regiones del país.
La olla para ahumar es algo muy usado en los países escandinavos.

Consiste en una olla que en su interior contiene una plancha bajo la que se colocan las virutas de madera, y una rejilla sobre la que se posan los alimentos que se desean ahumar.
La estructura del menú finés es muy similar a la del menú noruego o sueco.

Tienen su propia version del smörgasbord, en la que incluyen pescados de agua dulce, y en cuanto al día a día, el desayuno es bastante fuerte y el almuerzo es más ligero (una ensalada y café). La cena, se suele componer de ensaladas como entrantes, un plato fuerte como albóndigas o pasteles de carne, postre consistente en pasteles de canela y café para terminar.


 
ref.lugar: 30, actualizado el 25-12-2012