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Pakistán

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La cocina pakistaní se parece mucho a la de la India, con variaciones musulmanas. Los platos son menos picantes pero se utilizan sutiles mezclas de especias, así como mucho yogurt para neutralizar el sabor picante. La carne juega un papel más importante que en otras gastronomías del sur de Asia. Las más populares son las de ternera, cabra, cordero y pollo, pueden ir acompañadas de salsas especiadas (masala), cocidas en ragú (bhuna ghost), al horno (tandoor), maceradas en yogurt (korma) o en forma de brochetas (kebab). El arroz está muy presente, el basmati es el más consumido. Entre los postres, destacan los elaborados con frutos secos. Las comidas se acompañan principalmente con lassi (elaborado a base de yogurt), o té negro con leche, azúcar y cardamomo. Debido al predominio del Islam, las bebidas alcohólicas sólo se sirven en los hoteles para extranjeros, tras realizar algunos trámites burocráticos.
La gastronomía de Pakistán, famosa por su riqueza y sabor, puede describirse como una mezcla refinada de las tradiciones culinarias de Afganistán, la India, Irán, Asia Central y Oriente Medio.
Dentro de Paquistán, la cocina cambia enormemente de una región a otra, reflejando la diversidad cultural y étnica del país. La cocina del este, especialmente Sind, puede ser muy picante, al estilo de la del sur de Asia. Las recetas del oeste pakistanía (y hasta cierto extremo el Panyab), especialmente la Frontera del Noroeste, Baluchistán, los Territorios del Norte y la Cachemira Azad, emplean especias aromáticas suaves y menos aceite, al gusto de los iraníes y demás pueblos del centro de Asia.
Es muy popular el uso de la barbacoa, la parrilla para preparar kabab (Kebab en turco) y el tandur (tandoor, en inglés), horno de carbón vegetal con forma cilíndrica. La tasa, superficie plana o ligeramente cóncava de hierro, es empleada para cocinar los diferentes tipos de panes planos (roti). El karahi es una sartén parecida al wok, aunque con dos asas y con la base más plana, ideal para realizar frituras. En zonas rurales siguen utilizando un mantel conocido como dastarkhān, que se pone en el suelo.
Suelen tomar tres comidas al día: desayuno, comida y cena. Por la tarde, muchas familias toman té acompañado de dulces horneados o fritos. Durante el Ramadán, las comidas cambian a suhoor (primera hora de la mañana) e iftar (por la tarde). Se considera correcto comer solo con la mano derecha, como señala la tradición islámica.
La mayoría de los platos se sirven con lentejas, raita (salsa de yogurt especiada con sal, pimienta y cilantro) y tortas de trigo (chapati, paratha o naan). El plato principal se sirve con pan de trigo (naan) o arroz. La ensalada suele tomarse con el plato principal. De postre se toma fruta fresca variada o dulces. La cena se considera la principal comida del día, ya que la toda la familia se reúne para la ocasión.


 
ref.lugar: 44, actualizado el 26-08-2012